lunes, 25 de julio de 2016

Retrato en blanco y negro

Buenas tardes chicos,

Bueno antes de nada decir que ayer fue el aniversario del blog! si hace exactamente un año que lo abrí!! no os podéis imaginar lo mucho que agradezco tenerlo y sobre todo poder escribir.. No me arrepiento para nada de haberlo abierto.

A parte de ello, hoy os traigo otro microrelato que he escrito, espero os guste:


" si tuviera que pintarme, si tuviera que coger un lienzo en blanco y con una brocha dibujar mi propio retrato lo haría en blanco y negro, falto de colores, con solo luz y oscuridad.

Me dibujaría sentada, seguramente desnuda con un libro entre mis manos, como siempre me siento, abstraída de todo lo que me rodea, como si mi ser solo viviera en un mundo a parte, donde solo existen colores y donde nada dañino me pudiera tocar.

Y para comenzar a dibujarme comenzaría por mis pies, anchos y feos, con un empeine demasiado alto, con unos dedos demasiado separados, unos pies descalzos que dan paso a unas piernas... unas piernas cansadas de caminar sin rumbo, unas piernas feas, demasiado anchas en los muslos... unas piernas que solo mejoran tapadas.

Llegaría a la cintura, una cintura de mujer con curvas, sin embargo si alzo la vista e intento dibujar lo siguiente, no veo nada de una mujer bonita. Porque lo siguiente es el estómago. Dibujaría un estomago redondo, como el de una embarazada, pero sin la dulzura que emanan esos. Solo un estómago de chica gordita, de mujer que come cuando no debe y que a veces no sabe cuando parar de hacerlo.

Dibujaría unos pechos, grandes, voluptuosos pero que sin algo que los sostenga se vencen por su propio peso. Unos pechos que tal vez sean bonitos, pero que yo no los veo como tal. Tras ellos llegarían unos hombros y  un cuello, ni fino, ni largo, ni corto ni grueso, un cuello por suerte para mi, con un lunar en un lado. De los hombros dos brazos cortos, que acaban en unas manos algo gruesas, con unos dedos de la misma manera y con unas uñas, que casi nunca están largas ya que los nervios no las dejan crecer.

Lo peor de pintar sería el rostro. Es que acaso puedo dibujar mi propio rostro? Unos labios, donde el de bajo es más grueso que el de arriba, una nariz pequeña y algo chata, ligeramente desviada hacia un lado, pero después de todo algo graciosa. Unos ojos marrones, insulsos, que suelen estar pintados para darles algo de belleza, una frente no muy ancha y un cabello que cae sobre el rostro, ocultándolo, escondiéndolo para que nadie descubra lo que a veces gritan mis ojos. Un rostro algo gordito, redondo...

Ese sería mi retrato, una chica triste, soñadora, que lee, que lee porque prefiere la fantasía a la realidad, una chica que se oculta tras ropa, que esquiva los espejos para no verse. Un retrato en blanco y negro de el cuerpo que sostiene tal vez con un alma de colores. "


Un besazo de la chunga


1 comentario:

  1. Si tuviera que describirte, te descubriría en colores, porque el negro, el blanco y los grises, son colores, pero contrariamente a lo que tú puedas pensar, esos, no son tus colores sino los que te ha impuesto una sociedad a la que sólo le importa ser monocromático.
    Dentro de la olla a presión que es tu personalidad bullen, morados, azules, verdes, amarillos, y por supuesto grises, y negros, y blancos, sólo hace falta que estallen por la presión.
    Tus “defectos” deben ser tu orgullo, nariz torcida por parte de madre, vientre redondito por parte de padre… gente que te quiere y se desvive por tí
    Vive, ríe, viaja, disfruta dale una oportunidad a que los demás descubran tu variedad cromática

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