La poesía

Buenas tardes chicos,

Sí se lo que dije en el ultimo post, pero hoy  pues he decidido hacer un post más, no os podréis quejar la verdad. De ninguno a de repente dos! Estos días estoy en un plan más.... como decir... poetico? reflexivo? creo que reflexivo es la palabra correcta.

No se si alguna vez antes de esta lo he explicado, pero para mi la poesía es como el aire, no puedo vivir sin él. Es parte de mi vida y de mi alma. Me hace ser quien soy, hace que esos pájaros de mi cabeza canten y que la realidad no sea pura monotonía.

Cuando era un niña mi madre (y estoy segura que esto si os lo he contado) me leía un poema precioso, llamado la higuera. Un poema que al día de hoy aún recuerdo de memoria y que tiene una de las pocas frases que me tatuaría en castellano ("hoy a mi me dijeron hermosa")  Conforme fui creciendo cogí un libro de recopilación de poemas que teníamos en casa, uno de esos gordotes con un montón de autores, y comencé a leer de una manera curiosa, por las noches abría una pagina al azar y leía el poema. si me gustaba me lo escribía en una libreta que tenía.

Los años pasaron un poco, entré en la adolescencia, esa etapa en que te crees más listo que nadie y en que tus padres solo quieren que acabe ya. y me alejé un poco de esa vena tan... diferente que tenía, hasta que en 2º de Bat (bachillerato) un profesor, que hoy en día considero de los mejores profesores que he tenido, nos hizo leer Baudelaire (las flores del mal). Me quedé completa y absolutamente fascinada con esos poemas, al nivel de que en selectividad elegí la modalidad de poema de esa asignatura, a pesar de que era más difícil que la prosa.

Tras este reencuentro volví a abandonar un poco esa buena costumbre y ahora he vuelto, porque es algo que me salva cuando peor estoy, cuando más hundida estoy, solo tengo que leer el poema de la higuera y sonrío, aunque esa sonrisa dure a penas unos minutos sonrío.

La poesía es vida, es el espíritu de un sentimiento que nos envuelve y nos lleva. Nos hace soñar o llorar con unos sencillos versos, te da esperanzas o te convierte en un melancólico. Es un sueño, es el sueño dulce y de un escritor que un día decidió soñar. Y desde luego es una parte importante de mi, una de las partes que más me caracteriza.

No solo amo la narrativa, amo la poesía, me hace vivir, soñar, vibrar...

Si lo sé chicos soy rara, pero ya os lo he dicho muchas veces, soy una chunga que destiñe en mil colores...

Y antes de despedirme os dejo un poema, no no es la famosa higuera que ya he compartido alguna vez, es un poema de Pablo Neruda, uno de los integrantes de 20 poemas de amor y una canción desesperada, libro que adoro.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,

y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.

Parece que los ojos se te hubieran volado

y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma

emerges de las cosas, llena del alma mía.

Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, 

y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.

Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.

Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:

déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio

claro como una lámpara, simple como un anillo.

Eres como la noche, callada y constelada.

Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto

Un besazo de chunga chicos